La Reunión del Fracaso

La reunión del fracaso califica una columna de La Nación al encuentro de Belem. Dice la nota:

En un llamado Foro Social Mundial, un nombre rimbombante para decir nada, se reúnen cinco presidentes de izquierda de América Latina, entre los que figura el de Paraguay. Son los presidentes de menor éxito económico, jefes de Estado de países en estado de falencia, salvo el Brasil, cuyo presidente es de izquierda, pero no ejerce. Son los representantes del fracaso, con ideas que no tienen la menor perspectiva de resultar beneficiosas. Van acompañados, por lo menos el presidente paraguayo, de gente cuya ambición es matar la economía nacional aplicando las estupideces que hicieron de la América Latina el continente rico de los Perfectos Idiotas, y que teniendo que ser el continente de la felicidad es el de la miseria.

Este Foro de estúpidos, en el sentido estricto de la palabra, no hará otra cosa que repetir la retórica de los años en que se creía que el marxismo era la religión del modernismo y el progreso, y que es ahora una antigualla decadente, después de la experiencia vivida. Allá irá nuestro Presidente que hasta ahora no cayó en la cuenta que no está en un púlpito católico, sino en una tribuna política, donde las afirmaciones venidas del cielo no funcionan, para llenarse de ideología y venir a querer implantar en el Paraguay.

No acompañan a Lugo los empresarios, ni los economistas que tienen idea acerca de la coyuntura y cómo resolverla, sino sus cofrades de la izquierda paraguaya, los artífices del retraso, tanto económico como mental. No acompañan a Lugo los que tienen opiniones sensatas sobre Itaipú, sino su electricista preferido, que le está haciendo hacer los papelones más dolorosos de la historia paraguaya. Va pues, el Presidente, rodeado de iluminados, que no harán absolutamente nada por el progreso y el desarrollo económico del país. Resulta llamativo que no lleve a su director de la reforma agraria, que cree que con agricultura de subsistencia resolverá el problema de la pobreza en el Paraguay: Una hectárea, un machete, un buey y un arado…y la miseria por cien años.

Lugo irá a reforzar sus ideas sobre todo aquello que hizo del Paraguay un país miserable, con un altísimo desempleo real y con su niñez enseñada a delinquir en las calles, sin élites y sin pensamiento claro, con la corrupción más extendida del mundo y con las peores perspectivas posibles. Traerá, seguramente, toda la vieja palabrería con que países más avanzados intelectualmente se burlan del pueblo paraguayo, dorándoles la píldora de cianuro, y vendrá a hablarnos de la buena predisposición internacional, cantinela que se escucha desde el tiempo del estronismo.

Y aquí el coro de chupamedias y logreros aplaudirá hasta sacarse callos en las manos hasta que la “buena predisposición” se convierta en nuevos despojos. Y tendremos que mirar, con ojos de bueyes mansos, como nos roban el país sin que nadie diga nada.

Le deseo a Lugo éxitos en el Foro, ya que si los logra, por lo menos contará con un milagro. Y podríamos entonces esperar otros en el futuro.