Vistas de página en total

domingo, 24 de febrero de 2008

JAMES CASON, VIRREY DEL PARAGUAY

JAMES CASON, VIRREY DEL PARAGUAY
(Luis Agüero Wagner, publicado en El Mercurio Digital de España)
Sitioweb: http://elmercuriodigital.es/content/view/7589/40/

La historia recogió recientemente el papel de Antonio Arguedas Mendieta, ministro del Interior del general René Barrientos, en el rescate de algunas reliquias relacionadas con el Che Guevara, asesinado en Bolivia durante el gobierno al cual servía. Arguedas era un antiguo militante del partido Comunista Boliviano que había sido nombrado ministro por su compañero de alpinismo René Barrientos a pesar de la ira de la embajada norteamericana que lo consideraba marxista. Menos divulgada es la forma en que llegó a ministro, a través de un pacto con Larry Sternfield, jefe de la estación de la CIA en Bolivia, que si pasaba un interrogatorio sobre su identidad sería nombrado ministro. Agentes de la CIA llevaron entonces a Arguedas a Lima y lo sometieron a cuatro días de interrogatorio con un detector de mentiras y bajo fuertes dosis de Pentotal, la “droga de la verdad”. Arguedas pasó todas las pruebas y en agosto de 1966 fue nombrado ministro. Un caso paralelo es el del general José Félix Estigarribia, quien para llegar al poder en Paraguay e imponer su dictadura, pactó con Roosevelt en Washington, a cambio del respaldo norteamericano a su ascenso político, la entrega de la zona petrolífera del Chaco, recuperada en una guerra en la que él mismo había comandado al ejército paraguayo que la recuperó de los bolivianos.
Menciono estos ejemplos de obsecuencia al imperio considerando las interrogantes que dejó un extraño atentado contra el presidente paraguayo Nicano Duarte Frutos, en su mismo comando militar, y del que se sospecha de la misma cúpula de las Fuerzas Armadas de Paraguay, en su mayoría generales que se han especializado en las escuelas de golpistas de Fort Benning y otros centros de lavado de cerebro para militares latinoamericanos, y hoy responden a Washington con mayor fidelidad que a su propio gobierno.
Cualquiera podría pensar que en un país en los umbrales de sufrir una epidemia por fiebre amarilla y cuyo presidente ha sufrido un atentado de este tipo, la prensa estaría ocupada en estos temas realmente trascendentes, pero no es así. Hoy el tema que domina la prensa maccartista heredada de Stroessner –y que decide lo que en Paraguay es noticia- es la no declaración de cuentas de aportes para la campaña del partido oficialista, como si se tratara de una campaña electoral norteamericana aunque sean triviales e insignificantes los montos denunciados para un partido al que adhieren los hombres más acaudalados del país, habituados a realizar fuertes donaciones. Otro de los grandes titulares habla del pedido de rendición de cuentas hecho al oficialismo por Pilar Callizo, la representante de una organización financiada por la ultraderecha de Washington que además es conocida militante del opositor partido Liberal.
Estos medios paraguayos cuando deben dar la palabra a contestatarios sólo conceden espacio a los referentes que son favorecidos por Cason, quien hoy decide quienes pueden representar y quienes no a la oposición paraguaya mediante la prensa adicta a los sobornos que distribuye la embajada norteamericana.
Entre estos agrupamientos opositores al gobierno se cuenta al Grupo impulsor para la Regulación del Financiamiento Político en Paraguay, favorecido por los dólares de USAID e íntegramente constituído por nucleaciones opositoras, que declara que su objetivo es transparentar el origen y utilización de los fondos que reciben los partidos políticos, aunque no especifique quién transparentará el origen y utilización de los fondos que reciben ellos. Entre los referentes del grupo se encuentran cercanos colaboradores de la campaña del obispo Fernando Lugo como Perla Yore (Mujeres políticas en red), Gerardo Rolón Pose (partido Demócrata Cristiano), Teri Silvero (Encuentro Nacional), y otras nucleaciones fantasmas que sólo aparecen para recibir los dólares de la embajada como Mupoder (Pelusa Brítez), Red de Mujeres Munícipes del Paraguay (Nelly Servín), etc. También aparecen abiertamente en la lista grupos de declarados enemigos del gobierno paraguayo como los adherentes del Partido Patria Querida (representados por Cecilia de Frutos) y los adherentes del Partido Unace (representados por Emma Rolón).
El fluido relacionamiento entre periodistas paraguayos y la embajada norteamericana tiene vieja data, y es tan normal que trabajar como propagandista del imperialismo es considerado en este país como la cúspide de la profesión. El diario más leído y la radio más escuchada, Ñandutí, son medios subvencionados por la National Endowment for Democracy y USAID. Las estrellas de estos medios en la actual campaña proselitista son Camilo Soares y Rocío Casco, dirigentes de un minúsculo grupo que se hace pasar por guevarista pero recibe importantes sumas en dólares procedentes de la ultraderecha norteamericana, por intermedio de una organización no gubernamental.
Una de las estrellas del periodismo paraguayo, un ex policía de Stroessner devenido en periodista, Alcibíades González Delvalle, tiene un largo historial de servicios a la embajada norteamericana. Ya en la década de 1980 fue invitado varias veces por el vice-presidente George Bush (padre), a realizar giras por Estados Unidos y en innumerables ocasiones recibió donaciones de embajadores norteamericanos cuyo destino se desconoce. Gonzalez Delvalle no sólo es un ídolo del periodismo paraguayo, sino que es tan influyente que ha logrado silenciar su pasado como represor, y es más, hoy aparece como un perseguido por la dictadura ante la sociedad. Uno de los grupos que bajo el falso ropaje de izquierdas recibe financiación de USAID, el Movimiento Popular Tekojoja, ha llegado al ridículo extremo de presentarlo como referente de la lucha contra la dictadura en Paraguay para recibir apoyo del influyente periódico ultraderechista ABC color.
No es de extrañar el caso de Gonzalez Delvalle si tenemos en cuenta que en Paraguay, entre las supuestas víctimas de la dictadura anticomunista de Stroessner, han aparecido casos tan insólitos como ex delatores, informantes, torturadores y hasta un militante neo nazi.
Un caso parecido al de González Delvalle es el de Jean-Claude Criton, un ciudadano francés, cuya fotografía figura entre los represores que actuaron en la ex Escuela de Mecánica de la Armada (Esma), hoy convertida, por decisión del Estado argentino, en un espacio para la memoria. Criton cuenta con importantes relaciones con el mundo periodístico paraguayo, al que frecuenta, encontrándose actualmente en Paraguay donde se presenta como un perseguido, al igual que muchos otros.
Su fotografía aparece entre numerosos militares y policías que fueron identificados por las víctimas que pasaron por el centro clandestino de detención que funcionaba en la Armada en tiempos de Videla, un dictador muy apreciado por los medios paraguayos que llegaron a cantarle loas desde sus editoriales.
Los demás medios que gustan aparecer como campeones de la democracia, como los canales de televisión 9 y 13, el diario Ultima Hora, se originaron en fortunas malhabidas acumuladas en la era de Stroessner, cuyo consuegro el narcotraficante Andrés Rodríguez, obtuvo la venia del embajador Timothy Towell (un ex agente de la CIA ) para derrocar al longevo dictador y el congelamiento de sus antecedentes como pieza clave en la Conexión Latina , que traficaba la heroína nieve blanca de Marsella con rumbo al mercado norteamericano. Hoy aquel narcotraficante que amparaba a Auguste Ricord (Lucien Darguelles), ex agente de la GESTAPO y encubridor de criminales nazis refugiado en Sudamérica, es el prócer de la democracia de acuerdo a todos estos medios paraguayos.
Tal vez estas paradojas algo expliquen del porqué en este ambiente en el que nadie ni nada progresa, la carrera diplomática y los planes del virrey del Paraguay James Cason avanzan viento en popa, entre aclamaciones de la oposición y la gloriosa prensa paraguaya.
Luis Agüero Wagner

No hay comentarios: