LUIS AGÜERO WAGNER-El accionar del obispo Fernando Lugo, actual clérigo-presidente del Paraguay, no refleja el espíritu de cambio prometido, coinciden en señalar varios de los grupos que sustentaron electoralmente su candidatura.
"Está quedando cautivo de los mismos vicios de antaño" señaló el dirigente del Frente Social y Popular Marcos Ybañez (ABC color, 22.01.09, pag.4). Poco después otros dirigentes del movimiento Paraguay Pyahura señalaron que la esperanza en Fernando Lugo se apaga paulatina pero sostenidamente.
Una de las mayores controversias y usina de críticas fue la actitud del clérigo con respecto a la Corte Suprema de Justicia, a la que buscando renovar sacrificó sus promesas de eliminar los cuoteos políticos, y empezó a ofertar cargos y sobornos de toda índole. "Puso en juego las binacionales y cargos de todo tipo" afirmo en una nota el periodista Osmar Gómez Román.
Entre los cargos que fueron a remate se encontraban la dirección de Itaipú y Yacyreta, los consejos de ambos entes, las sillas en el Banco Central, Copaco, contraloría, viceministerios. La primera víctima fue el consejero de Yacyretá Roberto Paredes, que debió renunciar para que su puesto pueda ser ofertado, y le siguió un intento de soborno denunciado por el senador Alfredo Jaeggli. Luego se añadió otra denuncia de la Senadora Zulma Gómez.
Tampoco la militarización del norte del país cayó bien entre las bases luguistas.
“Condenamos la militarización y más aún cuando utilizan la tortura. Responsabilizamos de los hechos al ministro del Interior (Rafael Filizzola)”, había señalado por su parte Magui Balbuena, dirigente del Conamuri, un par de semanas atrás:
www.lanacion.com.py/noticias-224342.htm
En otra parte del documento se considera que en Paraguay "está en marcha el proyecto de instalación del Plan Colombia, que está siendo instrumentado por el ministro del Interior, Rafael Filizzola”, a quien piden que renuncie al cargo, especialmente si piensa continuar en la política".
PACTOS CON COLORADOS, EN EVIDENCIA
Los pactos con los neoliberales pitiyanquis del partido colorado, que responden a Luis Alberto Castiglioni, también quedaron en evidencia con la movida política buscando hacer la Corte Suprema.
Los castiluguistas anduvieron de casa en casa visitando a liberales y patriaqueridistas para tratar de asegura los votos, destacándose en la faena el senador Orlando Fiorotto.
A pesar de todos los esfuerzos, la votación fue un fiasco que anuncia una larga seguidilla de fracasos para el obispo, quien ahora ya no desmiente su intención en lograr una lejana reelección. LAW
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IZQUIERDA GESTADA EN LA EMBAJADA NORTEAMERICANA
La totalidad los integrantes del gabinete del obispo Fernando Lugo provienen del sector de las ONGs financiadas por la embajada norteamericana. Se cuentan entre ellos a Gloria Rubín (referente en Paraguay del NED y la CIA), Camilo Soares (beneficiario de fondos de IAF y NED, favorecido del gobierno de George W. Bush) Rafael Filizzola (signatario de acuerdos con Alvaro Uribe a instancias de la ex operadora del plan Colombia Liliana Ayalde), Karina Rodríguez (de la Casa de la Juventud, que recibió 127 mil dólares de la Inter American Foundation), Liz Torres (referente de las logias de ONGs dependientes de la embajada norteamericana), Esperanza Martínez (del movimiento Tekojojá, financiado por USAID, hoy envuelto en escándalo por corrupción), Canciller Hamed Franco (del Pmas, un movimiento financiado por James Cason), el Vice-canciller Jorge Lara Castro (recibe dólares de la embajada a través de la ONG fantasma Alter Vida), Ministro de Defensa General Bareiro Spaini (hombre de la embajada norteamericana, educado en las escuelas de golpistas de Estados Unidos) o el ministro de Hacienda Dionisio Borda, antiguo responsable de las finanzas de los gobiernos corruptos y agente de la embajada norteamericana y del FMI.
Asimismo, Fernando Lugo ha anunciado que se mantendrá la política de sometimiento al imperio nortemericano en Paraguay, y se desconoce lo tratado por Lugo en New York con referentes de la mafia ítalo-norteamericana como John Tonelli, o con el heredero del imperio petrolero que en la década de 1930 llevó a la matanza a cien mil bolivianos y paraguayos, David Rockefeller. Lo único cierto es que ofició de guía turístico en la gran manzana Conrado Pappalardo, un personaje conocido por haber operado para el Plan Cóndor y haber proveído pasaportes para el asesinato en Washington de Orlando Letelier.
Otros cónclaves nunca aclarados por parte del obispo fueron sus reuniones con James Cason y Roger Noriega, pocos segundos después que Aleida Guevara March, hija del Che Guevara, haya abandonado la misma oficina por la misma puerta por la que entraron estos grandes amigos de Cuba y los hermanos Castro.
No se sabe el motivo de las visitas de Christopher McMuller, subsecretario norteamericano de Asuntos del Hemisferio Occidental, al viceministro de Relaciones Exteriores paraguayo, Jorge Lara Castro, un viejo favorecido de la embajada norteamericana de Asunción.
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