LUIS AGÜERO WAGNER- El obispo Fernando Lugo cuenta con cuarenta asesores en su equipo que intenta la renegociación del Tratado de Itaipú, fracasando una vez tras otra sin visos de esperanza.
El dato fue confirmado por Gustavo Codas, integrante del equipo negociador, según publica hoy La Nación:
http://www.lanacion.com.py/noticias-228442.htm
El número de asesores casi coincide con la cantidad de años que lleva fracasando la campaña del diario ABC color, buque insignia de la derrota y deterioro de las relaciones paraguayo-brasileñas, desde que el dueño del diario quedó fuera del negocio en la década de 1970, cuando otros grupos empresariales se quedaron con las jugosas licitaciones para la contrucción de la represa.
La mayoría de estos "Asesores" en realidad son personajes con poca o nula preparación en el tema, según hicieron notar los mismos negociadores brasileños, pero que gustan involucrarse en una campaña mediática en busca de algún jugoso zoquete en la binacional.
En la última reunión en Brasilia, hace pocas semanas, los responsables brasileños pidieron que la próxima vez envíen una nota para no molestarlos en la capital del Brasil, donde tienen cosas más importantes que hacer que perder su tiempo con figurones y vedettes de la prensa anticomunista paraguaya (léase ABC color).
Paralelamente a esta cortina de humo, el gobierno ha desatado una sangrienta represión de campesinos en San Pedro, buscando complacer a la embajada norteamericana de Asunción en su afán de beneficiarse con la Ley de Preferencia Comercial Andina" (ATPDEA, por sus siglas en inglés), un sucedáneo del ALCA.
Uno de los puntos que más ha intentado intensificar el gobierno es la guerra contra las drogas, dado que Bolivia perdió sus "beneficios" de la ATPDEA por negarse a cooperar en la erradicación de coca.
ENTREGUISMO ANTE LOS SOJEROS BRASILEÑOS
La campaña hidronacionalista del Luguismo tiene muchos puntos contradictorios, sobre todo porque es entreguista cuando se habla de tierras fronterizas.
Los mismos que manifiestan un supuesto nacionalismo casi chauvinista en el tema de Itaipú, critican las reivindicaciones nacionalistas de los campesinos en defensa de colonos brasileños abocados al tráfico de soja transgénica.
Curiosamente, la prensa que manifiesta un supuesto nacionalismo casi chauvinista en el tema de la represa de Itaipú, editorializa fuertes críticas a las reivindicaciones nacionalistas de los campesinos en defensa de colonos brasileños abocados al tráfico de soja transgénica.
ENTREGUISMO PARA LAS TIERRAS
Muchos brasileños, que compraron tierras destinadas a la reforma agraria a los corruptos gobiernos paraguayos, se dedican en la franja limítrofe entre Paraguay y Brasil al contaminante cultivo de soja transgénica, y advierten al gobierno “hidronacionalista” que no grave sus exportaciones y desarrolle una política agraria antinacional. Vale decir, nacionalismo para las aguas, entreguismo para las tierras.
Estos filántropos solo piden, como es sabido, que les dejen “producir riqueza para el país y para las arcas estatales” en la forma altruista en la que lo han venido haciendo, es decir, concentrando tierras, expulsando de sus parcelas a familias campesinas que deben migrar al exterior en busca del sustento y enviando una buena cantidad de intoxicados a los hospitales o al cementerio.
Ya en 1912 el traficante de granos Leopold Louis Dreyfus afirmaba que su objetivo era “satisfacer una gran necesidad económica y humana” y no simplemente ganar dinero y hacer crecer a su corporación. Eufemismos parecidos hoy utilizan quienes buscan justificar los principios destructivos del sistema neoliberal; en el que el mercado subordina a los derechos humanos, a la justicia , la democracia, y a la sustentabilidad medioambiental. La soja transgénica, hermana consanguínea del terremoto, coetánea del volcán y el torbellino, una gigantesca fuerza que da forma al mundo, oleada colosal, se infla y avanza sobre el Paraguay. Como una ola de marea, sube y sube.
Ya lo dijo Lenin, el cereal es la divisa de las divisas, y la teología neoliberal que en Paraguay ha sentado sus reales con la bendición del obispo Fernando Lugo nos ha despojado de voz para opinar a quienes no tenemos un dólar invertido en el negocio.
HISTORIA DE INIQUIDADES
Según las fuentes manejadas por el obispo, Brasil estaría dispuesto a pagar a Paraguay US$ 140 millones en concepto de compensación por cesión de energía de Itaipú por el excedente que no utiliza.
Itaipú produce 90 millones de megavatios/hora y a Paraguay y Brasil corresponden 45 millones a cada uno por ser socios condóminos.
Brasil utiliza la totalidad de la energía que le corresponde y compra el excedente que no utiliza Paraguay (37.500.000 megavatios/hora).
Brasil saca exclusivo provecho de Itaipú porque le paga a Paraguay mucho menos, según algunas fuentes. Sin embargo, Brasil alega haber garantizado los créditos sin los cuales no se hubiera podido construir la represa.
LA VERSIÓN DE LA PRENSA VINCULADA A LA CIA
Según cierta prensa vinculada a la CIA, Paraguay es estafado por Brasil.
Se cita con insistencia que este país recibió de Brasil en el 2007 apenas US$ 100 millones en concepto de compensación por cesión de energía excedente. Es decir, que por 37.500.000 megavatios/hora de la energía de Itaipú que Paraguay no utiliza, Brasil le paga sólo US$ 2,7 megavatios/hora, según la planilla de la Dirección Financiera de Itaipú.
Sin embargo, siempre según estas fuentes, Brasil debe pagarle a Paraguay US$ 35 por cada megavatios/hora, porque ese es el precio que el Gobierno brasileño le paga a Itaipú por cada megavatios/hora. Hay que tener en cuenta que Brasil consume la totalidad de los 45 millones de megavatios/hora que le corresponden, mientras que nuestro país apenas utiliza el 17,8% de lo que le corresponde y el 82,2% debe ceder obligatoriamente el vecino país.
LAS DUDAS SOBRE LAS FUENTES DE INFORMACIÓN
Desafortunadamente, estas reivindicaciones son agitadas por un diario sin credibilidad ni autoridad moral para realizar reclamos de esta índole, además de constituir una campaña anti-brasileña sin coherencia ni lógica.
Estamos hablando del diario ABC color, cuyo principal accionista es un antiguo financista de la Liga Mundial Anticomunista que realizó negocios con Massera y la Secta Moon, Aldo Zucolillo. Zucolillo, además de hidronacionalista anti-brasileña en el tema de Itaipú, es un gran defensor de la invasión brasileña de sojeros, que promueven el modelo de la transnacional Monsanto y convierten en excluídos a los paraguayos en el norte y este del país.
En otros tiempos dedicaba loas a Pinochet, Stroessner, Videla, Etc., e incluso donaba dinero a los centros de detención y torturas de la dictadura paraguaya.
Otro de los dueños del diario, Conrado Pappalardo, se encuentra involucrado según documentos desclasificados por el departamento de estado norteamericano, en el asesinato en Wáshington del ex canciller chileno Orlando Letelier. Cuentas pendientes con la justicia de otros países de la región, de tamaño calibre, explican la radical oposición de ABC color a la integración regional.
UNA CAMPAÑA ABSURDA
Como es una tradición, referentes del periodismo servil que impera en los medios de comunicación paraguayos, intensifican sus tendenciosas criticas al MERCOSUR en los días cercanos a las Cumbres.
Sin embargo, lo absurdo de las campañas es que realizan ante la opinión pública y la clase política paraguaya, a quienes se impone un libreto que no ha conmovido hasta ahora al Brasil, en cuyas manos está la solución. Lo más sensato por parte del diario ABC color sería intentar convencer a la opinión pública del Brasil y a sus líderes políticos, pues los paraguayos no se opondrían jamás a un tratado más conveniente, pero no pueden decidir nada al respecto.
La campaña de Zucolillo y ABC color tendrá lógica el día que lo emprenda en Brasil, ante la opinión pública de ese país, y ante la clase política que maneja el Planalto. LAW
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